Cito al propio Lowry, quien parafraseaba a E. Wilson para afirmar que Bajo el volcán es una novela que se refiere a “ciertas fuerzas existentes en el interior del hombre que le producen terror de sí mismo”. El infierno pasional que aquí se narra es uno de los más terribles en la historia de la literatura, protagonizado por un consul inglés ebrio, atormentado y sin trabajo después que México y el Reino Unido han roto relaciones a causa de la Expropiación petrolera. A su lado (por no decir “de vuelta”), una mujer intenta rescatar los restos de un amor despeñado hacia la locura, mientras desde Europa llegan los rumores de una guerra mundial. Epopeya de la autodestrucción, viaje dantesco en sentido inverso, se entiende la fascinación de Heras y Pelaez por esa resonancia que sugiere tan inestable universo. Lo notable en este caso es que los autores arranquen la máscara del supuesto cónsul y pongan en acción al protagonista original –Malcolm Lowry–, de tan novelesca historia como sus personajes. Biografía dramatizada a lo Miller (a lo Lowry), esta “plegaria desde una sucia cantina” tiene la virtud de decantarse por la dimensión sonora que el novelista defendió rabiosamente, y por encima de eso genera imágenes capaces de embriagar los sentidos del lector. Ese es el propósito, así que tómelo con calma, sírvase una copa y encienda un tabaco: entre “alcohol, pipa y tecleo” transcurre este viaje circular que algún día espera alcanzar al Paraíso.
-------
Presentación a Silvia Peláez y Guillermo Heras (2020) A punto de veneno, México, Paso de Gato # 56.
2 comentarios:
Querido Luis Mario. Tus palabras incendiaron mi mente y volvería a escribir otra obra sobre Lowry y su mundo. Muchas gracias. Te abrazo.
Silvia Peláez
Publicar un comentario